Muchos de los jóvenes, niñas y niños se sienten orgullosos de sus llamas y cuentan a los pobladores vecinos que sus llamas son el resultado de mucho trabajo y sacrificio. La experiencia ha sido muy positiva.

Cuando la educación a distancia no es una opción

Etiopía

Oct 16, 2020

Cuando la educación a distancia no es una opción

En Etiopía, la crisis sanitaria ha dejado a más de 26 millones de niños y niñas sin clases.

En la zona rural de Meki, se espera la reapertura de las escuelas, de forma presencial y segura, una prioridad para que estos alumnos y alumnas retomen sus enseñanzas.

La educación de los niños y niñas ha de ser una prioridad en todas partes del mundo. Como reza el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, debemos trabajar para “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad; y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”. A raíz de la pandemia de coronavirus, este objetivo se ha visto fuertemente golpeado, ya que hasta 1.500 millones de estudiantes vieron sus escuelas cerradas en el momento álgido de la crisis sanitaria.

El informe “Accesibilidad del aprendizaje remoto”, elaborado por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) ha puesto de manifiesto, además, que en torno a un tercio de estos niños y niñas – 463 millones en total – no han tenido acceso a clases virtuales o por otro medios, como radio y televisión.

Esto nos da una idea, en primer lugar, de cómo se ha visto comprometida la educación de millones de jóvenes en todo el mundo; y, en segundo lugar, de hasta qué punto depende la educación del espacio físico en el que se desarrollan las enseñanzas, de los materiales escolares y, por supuesto, del profesorado que lo hace posible.

En todos los países, la comunidad educativa se debate por tomar las mejores decisiones para favorecer la educación de los más jóvenes y, a su vez, asegurar una vuelta a las aulas segura y con todas las medidas de higiene necesarias para prevenir la expansión del virus. No obstante, es fácil deducir que el debate no se encuentra en el mismo punto en países tan distintos como pueden ser España y Etiopía, aunque en ambos nos enfrentamos a la incertidumbre de no saber cuándo acabará la crisis sanitaria.

26 millones de niños y niñas sin clases en Etiopía

Mientras en los países más desarrollados las familias, el profesorado y las instituciones educativas discuten sobre las diversas opciones para este curso escolar tan atípico o las medidas para facilitar la educación online en caso de que se cierren las aulas; en Meki, Etiopía, donde la Asociación Nuevos Caminos trabaja desde 2014, el debate es algo distinto.

El sistema educativo etíope se encuentra con grandes barreras, que ponen en riesgo el desarrollo formativo de los 26 millones de los niños y niñas que se han visto afectados por el cierre de las escuelas, que se decretó el pasado 16 de marzo. Esto ha afectado especialmente a las zonas rurales, donde se concentra el 80% de la población, y donde solo es posible la educación presencial

Allí nos encontramos, por un lado, con una barrera puramente física: la escasez de aulas para el número creciente de jóvenes. Para muchas familias, el problema no está en decidir si llevar o no a sus hijos e hijas al colegio cuando empiece el curso, sino en saber si habrá un aula disponible, cerca de su hogar. En Meki, la capacidad total de las escuelas primarias está muy por debajo del total de niños y niñas.

Y, por otro lado, está la barrera tecnológica. Menos del 2% de la población etíope tiene acceso regular a Internet y, a pesar de que el gobierno nacional habilitó en el mes de abril un canal de radio y televisión para la enseñanza, en el ámbito rural, solo el 29% de los hogares tienen radio y el 11% televisor (UNICEF). A esto se unen los continuos cortes en las conexiones, que fueron totales entre el 30 de junio y el 23 de julio, cuando se limitó el acceso a Internet por la oleada de protestas en el país.

Esto nos da una idea de las limitaciones con las que se encuentra Etiopía para asegurar la educación de las generaciones más jóvenes en este nuevo curso 2020 – 2021. Un problema que se extiende a muchos otros países en desarrollo y que podría catalogarse como de emergencia educativa mundial.

Para contrarrestar estas limitaciones, el gobierno de Etiopía facilitó el aprobado a todos los cursos de primaria de 1º a 7º para favorecer la vuelta al cole; y ha permitido, desde hace unas semanas, que las escuelas empiecen el registro de alumnos y alumnas para el nuevo curso. En principio, el inicio del curso en Meki será el lunes, 26 de octubre, ¡un día que esperamos con inquietud e ilusión!

Compromiso con la educación presencial

En la Asociación Nuevos Caminos llevamos años trabajando para favorecer la educación de los niños y niñas de Meki, participando en el día a día de sus escuelas de educación primaria y poniendo en marcha proyectos como Aulas por la Salud y Aulas por la Igualdad. Este año, a pesar de la situación de adversidad, estamos felices por haber cumplido con nuestro objetivo de apoyar a la Escuela de Oda con la construcción de cuatro nuevas aulas, un proyecto que ha sido posible gracias al apoyo de nuestro socios, socias y donantes.

En un contexto en el que, como hemos visto, la desigualdad en el acceso a recursos educativos es tan amplia, no podemos plantearnos otra opción que una vuelta a las aulas de forma presencial y segura. Por el momento, el debate en las comunidades en las que trabajamos no pasa por evaluar si la enseñanza online podría cumplir con la calidad que el alumnado necesita, simplemente porque no es posible, no es una opción. La presencia física en el aula es necesaria y, como han explicado las distintas agencias de Naciones Unidas, debe ser prioritaria en cuanto la situación sanitaria lo permita.

Se espera que, en los próximos días, las autoridades locales de Meki inauguren las nuevas aulas construidas en la Escuela de Oda para que muy pronto dé comienzo el curso. Mientras tanto, te invitamos a participar en la preparación de las aulas, que necesitamos equipar con pupitres. Por eso, hemos iniciado una campaña de recogida de fondos. Infórmate aquí y compártela con tus conocidos.

¡Dona un pupitre para la Escuela de Oda!

¡Y contribuye a que sus alumnos y alumnas puedan seguir estudiando!

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Si prefieres donar otra cantidad, visita la web de la campaña o haz tu aportación a través de los siguientes canales:
– Transferencia bancaria: ES37 2100 3004 1622 0031 6043
– Bizum: 00296

¡Muchas gracias por tu colaboración!